EL ESPERPENTO
Situación grotesca. Así lo define el diccionario y así lo califican los seguidores del Real Madrid y los medios de comunicación que siguen con perplejidad lo que está sucediendo estos días en el Club.
Era la historia de un lio anunciado cuando, contraviniendo la opinión del Director Deportivo, responsable teórico de la planificación del equipo y, por tanto, también de la designación del entrenador, se contrató a José Mourinho.
Y de aquellos barros vienen estos lodos. Florentino quiso demostrar a Valdano quien manda y a lo que uno debe plegarse cuando acepta venderse por dos millones y medio de lentejas (léase euros). Y le obligó a aceptar, contra su expresa voluntad, a quien desprecia, como persona y como entrenador, y a tragar con su presentación pública a la que él ni siquiera asistió.
Es su forma de proceder, con contrataciones y despidos surrealistas, en los que nunca ha escuchado a nadie, porque considera a los profesionales unos vividores a quienes no tiene más remedio que aceptar, muy a su pesar. Siempre ha creido que el mejor entrenador y director deportivo sería un ingeniero. Hasta la información que facilita la play-station le sirve mejor que la de un director deportivo. Hablando de esperpentos no les sorprenda que Pérez se burlara de los técnicos del Real Madrid porque no tenían informes de Woodgate, cuando la play-station le daba la máxima calificación y así se lo había confirmado su hijo Chivo.
Después del enésimo desastre en la planificación del equipo, y de haberse gastado 450 millones de euros, tenía que agarrarse al clavo ardiendo del entrenador. Y no se dignó escuchar a Valdano sobre los muchos problemas que su caracter podría causar a un club como el Real Madrid y tampoco le importó pagar al Inter la friolera de 18 millones de euros y fijarle un sueldo anual de otros 16 millones, más incentivos por títulos conseguidos. Era una prueba de fuego para el responsable deportivo que iba a dejar huella.
Desde el inicio, la relación entre entrenador y director deportivo es inexistente y, al menor contratiempo, la bomba les ha estallado a todos en las manos.
Valdano es mucho más listo que Mourinho y sabe esperar. Es de los que tiene claro que la venganza se sirve en plato frio y está disfrutando de lo lindo con los numeritos del portugués. También conoce a Florentino como pocos y por eso ha sabido exprimirle al máximo. No olvida que le echó a los leones cuando fracasó su segundo proyecto y le despidió antes de terminar su contrato. Por eso, en el nuevo, y por si acaso, le ha exigido unas condiciones económicas estratosféricas para el puesto que desempeña, y que no es otro que el de simple portavoz, sabiendo que le necesita como parapeto y escudo ante posibles fracasos.
A todo esto, el portugués, también sabedor de su poder, por la situación desesperada del presidente, que hace imposible su despido, ha echado un órdago al que nadie sabe cómo responder. Veremos cuál es el desenlace y quien de los protagonistas gana la partida. Pero el que seguro que ya la ha perdido y va a tener que pagar los platos rotos es el Real Madrid.
Y para colmo de males, ha aparecido en escena , como espectador, un tonto de solemnidad que es un enfermo del protagonismo. Ya saben que a los mirones solo se les permite callar y dar tabaco, pero Macario no está por labor y, conocida su enemistad manifiesta con Valdano, ha decidido entrar en liza y apoyar abiertamente al entrenador y con él todas sus pretensiones, incluido el fichaje de un delantero centro.
En fin, que Dios nos coja confesados.
Buenas tardes Ramón y feliz año.
A día de hoy están nerviosos, pero como no se pase ante al Olimpique de Lyon y el Barcelona ponga más distancia en Liga, creo que puede haber un terremoto en Chamartín.
Es intolerable lo que se han gastado en fútbol y baloncesto.
Necesariamente esto va a traer cola pues los socios no comulgan con ruedas de molino y aquí como siempre, lo único que cuenta son los títulos.
A Florentino le da exactamente igual el Club y volvería a dar sin problema una espantada.
Aunque sea malo para el Madrid, le está bien empleado.
Alejandro
Un análisis perfecto. Ayer, en una comida de madridistas dije excatamente lo mismo.¡Feliz Navidad!